Cepsa ha desarrollado un asfalto más seguro que consume menos energía en la fabricación y producción y es más sostenible ya que aprovecha subproductos de complicada gestión generados en sus refinerías de petróleo (La Rábida y San Roque).
En su actividad habitual de refino y petroquímica, las refinerías de Cepsa generan materiales de difícil gestión ambiental, algunos de estos materiales pueden ser regenerados y reactivados para volver a integrarlos en la unidad de producción pero otros no permiten ser reutilizados.
El uso de estos subproductos en las mezclas asfálticas permite trabajar a temperaturas inferiores a las habituales. El material podrá ser utilizado para mezclas asfálticas de baja temperatura (carreteras) y también para otras mezclas asfálticas y sintético ( pavimentación de garajes, carriles, etcétera).
El desarrollo del proyecto de I+D+i ha sido financiado por Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), a través de un incentivo que está íntegramente subvencionado por la Consejería de Economía y Conocimiento y el Ministerio de Economía y Competitividad.