El mercado eléctrico español presencia un marcado descenso en los precios de la energía durante marzo, gracias al imponente auge de las energías renovables, especialmente la hidráulica, que marca un récord en generación.
Durante marzo, el mercado mayorista de electricidad en España experimentó un espectacular descenso en los precios, con una reducción del 49% en comparación con febrero y un asombroso 77,4% menos en comparación con el mismo período del año anterior, alcanzando un precio diario de 20,31 euros/MWh. Este fenómeno se debe en gran medida al aumento sin precedentes en la generación de energía renovable, con la hidráulica liderando el camino al incrementarse en un impresionante 140%.
Expertos del Grupo ASE señalan que para encontrar precios tan bajos como los registrados en marzo, hay que remontarse a los momentos más críticos de la pandemia en abril de 2020. Este notable descenso en los precios se atribuye al extraordinario aumento en la generación renovable, relegando a las centrales de generación convencional a un papel secundario.
La producción renovable cubrió el 67,6% del mix de generación en marzo, superando el récord establecido el mes anterior. El incremento excepcional en la generación hidráulica, que creció un 141,6% en comparación con el año anterior, fue el principal impulsor de este logro. Mientras tanto, la energía eólica se redujo un 9%, y la fotovoltaica experimentó una disminución del 1,7%, posiblemente debido a factores climáticos y técnicos.
La presencia de las centrales nucleares también se vio afectada, con tres de los siete reactores en España parados durante gran parte de marzo, tanto por problemas técnicos como por los bajos precios. A pesar de esto, el precio de la electricidad se mantuvo en mínimos debido a la alta producción hidráulica.
La sobreoferta de generación intermitente llevó a que en el 18% de las horas el precio de la electricidad fuera prácticamente nulo, y en el 32% de las horas se situara por debajo de 1 euro. Esta situación, iniciada por una sucesión de borrascas, fue potenciada por la extraordinaria producción de los embalses hidrológicos.
Además, la capacidad de almacenamiento de los embalses hidráulicos españoles, que se encuentra en un 69,2%, garantiza un fondo de reserva adicional para el verano, reduciendo la previsión de generación de los ciclos combinados de gas en más de un tercio en comparación con el año anterior.
Aunque el precio de la electricidad en España ha cerrado el primer trimestre en niveles similares a los previos a la crisis energética, sigue siendo un 41% más barato que en las principales economías europeas, gracias a la menor dependencia de energías fósiles y al incremento en la generación renovable y nuclear.
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