En el año 2002, Repsol inauguró en Móstoles su mayor centro de tecnología e innovación.
La zona se extiende a lo largo de 56.000 metros cuadrados donde realiza fundamentalmente investigación aplicada y cuenta con 8 laboratorios especializados, además de una planta piloto de refino.
En 2016, el centro registró 25 nuevas patentes y realizó 22 publicaciones. Repsol dispone de más de un centenar de socios tecnológicos, con los que trabaja en proyectos de creación y coinversión. En el campus se ubica también una aceleradora de ‘start up’.
Ahí han descubierto algo que denominan “petróleo difícil”, el cual no se encuentra en estado líquido, sino impregnado en una roca porosa.
En el mismo centro usan el “Big Data” para calcular la probabilidad de que haya petróleo en un lugar determinado y si sale una probabilidad elevada se aprueba la perforación, equivocándose muy pocas veces: con una pequeña muestra del subsuelo lo consiguen.