Mauricio Macri, presidente de Argentina, acudió al almuerzo entre empresarios norteamericanos del sector petrolero en Houston.
El presidentes adelantó que se va a implementar en lo inmediato un régimen para la importación de bienes de capital usados para la industria de hidrocarburos, lo que facilitará sustancialmente las inversiones en yacimientos como los de Vaca Muerta.
En la práctica, esto implicará simplificar la importación de bienes de capital para impulsar las inversiones. Según se dijo, este régimen prevé bajar del 35% al 7% el arancel fijado para un listado determinado de bienes de capital usados. Lo que busca en última instancia esta medida es darle orden, previsibilidad y transparencia al sector para el desarrollo de yacimientos como el de Vaca Muerta.
Asimismo, anticipó que «se están confirmando entre 6000 y 8000 millones de dólares de inversiones en Vaca Muerta» y estimó que en 2019 «tendríamos que estar en un nivel de inversiones de 20.000 millones».
Durante su discurso, el jefe de Estado argentino puntualizó que para lograr mayor competitividad se necesita «un fuerte proceso de inversión, y la inversión se logra de la mano de la confianza de que somos un país y una sociedad que va a mantener las reglas de juego claras, predecibles y sustentables en cada una de sus decisiones».
En sintonía con esto, advirtió que Argentina «tiene una larga tradición en petróleo y gas», pero que las «políticas erróneas, muy destructivas» de la última década llevaron a que pasara de ser exportador a convertirse en un «importante importador de energía». También adelantó que YPF «tiene un rol muy importante, muchísimos espacios para desarrollar y con toda la capacidad suficiente está buscando buenos socios».
«Acá trabajarán de la misma manera empresas extranjeras que argentinas, todas pensando en lo mismo: producir energía de forma sustentable, segura, y a precio más barato posible», sostuvo.
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