Los precios del petróleo fluctúan ante la incertidumbre en Oriente Medio, donde las tensiones geopolíticas amenazan con desatar un conflicto de gran escala. Especuladores abandonan posiciones ante el temor a un aumento del riesgo.
La inestabilidad en Oriente Medio ha mantenido en vilo a los mercados energéticos mundiales, con la continua amenaza de un conflicto que podría desestabilizar aún más los precios del petróleo. A pesar de las tensiones entre Irán e Israel, que incluyeron ataques y contraataques, los precios del crudo no han seguido la escalada temida por muchos.
La incertidumbre generada por el enfrentamiento entre Irán e Israel ha llevado a los especuladores a retirarse del mercado, disminuyendo su posición larga neta en más de un 11% en apenas una semana, según análisis de ING. A pesar de episodios como el ataque israelí a Gaza y la respuesta iraní, que incluyó ataques con drones, el precio del petróleo solo ha aumentado ligeramente, mostrando una reacción contenida a los eventos en la región.
La posibilidad de un conflicto a gran escala, como un bloqueo del estrecho de Ormuz, ha generado preocupación en los mercados, pero las expectativas de un alto al fuego entre Israel y Hamás han contribuido a calmar los ánimos. Aunque persisten riesgos, como los ataques a infraestructuras petroleras, como el reciente ataque con drones a una refinería rusa, los analistas señalan que el mercado está en un estado de espera, evaluando el desenlace de las tensiones.
Mientras tanto, la OPEP ha logrado mantener cierta estabilidad en el mercado mediante recortes voluntarios y una oferta controlada. Aunque se espera que a partir de julio aumente gradualmente su producción, esto no tendrá un impacto inmediato en los precios, dada la demanda sostenida y los riesgos geopolíticos persistentes.
A pesar de las tensiones en la región, los expertos señalan que el mercado del petróleo se encuentra en un estado de «limbo», donde los precios están influenciados tanto por los fundamentos como por las tensiones geopolíticas. Aunque un conflicto a gran escala podría elevar los precios significativamente, la reacción actual del mercado sugiere una cautela generalizada ante las posibles implicaciones de una escalada en Oriente Medio.
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