En su boletín informativo, la petrolera Repsol explica que sus expatriados se concentran en el área de exploración y producción, hasta el punto de que seis de cada siete desarrollan actividades en este ámbito laboral.
Para hacer frente al reto de movilizar este volumen de trabajadores en el exterior, Repsol ha asumido la presidencia del Foro Español de Expatriados , que es la asociación de grandes empresas en la que se ponen en común las mejores prácticas en la gestión del empleo en el exterior.
En la actualidad, los expatriados de Repsol se reparten por más de 30 países. Latinoamérica, con un 31%, es la región que atrae al mayor número de ellos, frente al 19% de Norteamérica, el 9% de Europa o el 21% de África.
La compañía destaca la buena acogida de los traslados por parte de los profesionales, que ha permitido cubrir incluso los destinos más complicados, como Irak o Argelia.
La política de expatriación se centra en el área técnica y no supone un menoscabo para el empleo local, ya que solo en operaciones muy concretas el personal expatriado es mayoría, en una empresa que cuenta con más 24.000 trabajadores en todo el mundo.
PERFIL MUY CUALIFICADO.
La presencia de estos trabajadores responde al alto grado de especialización para unas actividades que a menudo no pueden desarrollar las empresas locales.
La propia Repsol realiza un esfuerzo especial en la formación de estos perfiles, con un máster específico del que cada año salen entre 40 y 50 jóvenes de todo el mundo.
Otra de las particularidades de la empresa es la de contar con un cuerpo especial de expatriados para misiones especiales. Este grupo, creado en 2007, opera por un plazo breve y con un alto perfil técnico, y se conoce como REAS (Repsol Exploration Advanced Services).
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