A pesar de los desafíos económicos y geopolíticos, el sector energético español experimenta un impulso significativo en fusiones y adquisiciones (M&A) durante el 2023, con 194 operaciones que totalizan 14,700 millones de euros. La energía solar y eólica lidera las transacciones, representando el 80% del valor total, mientras que el interés crece en proyectos innovadores como el hidrógeno verde. Descubre cómo España mantiene su atractivo para inversores extranjeros en un mercado energético en constante evolución.
Las operaciones de fusión y adquisición (M&A) en el sector energético continúan siendo destacadas, a pesar de enfrentarse a un entorno desafiante caracterizado por tipos de interés elevados que encarecen la financiación, una inflación en niveles máximos y tensiones geopolíticas que incrementan los costes. En el año 2023, en España se llevaron a cabo 194 operaciones, lo que representa 48 menos que en el año anterior; sin embargo, el valor total de estas transacciones aumentó un 6,5%, alcanzando los 14.700 millones de euros, según datos proporcionados por TTR Data.
El segmento más destacado fue el de las compañías relacionadas con la energía solar y eólica, que representaron el 80% del valor total de las operaciones. Entre las transacciones más significativas se encuentran la venta de Enerfín por parte de Elecnor y la de X-Elio Energy por KKR, con montos de 1.800 y 1.763 millones de euros, respectivamente.
Adicionalmente, se observó un incremento considerable en las operaciones vinculadas a áreas verdes, como equipos de energía renovable, productos y almacenamiento, biomasa y biocombustibles. Este último segmento experimentó un aumento significativo, pasando de una transacción en 2022 a ocho en el ejercicio pasado. Jesús Reglero, profesor de OBS Business School, destaca que, a pesar de que 2023 fue un año desafiante para las M&A en general, el sector energético, especialmente en renovables, experimentó una notable actividad en la compra y venta de proyectos.
Juanjo Corral, socio de corporate M&A de Baker McKenzie, comparte su experiencia desde el punto de vista del asesoramiento, subrayando que la transición energética ha impulsado operaciones de gran envergadura lideradas por modelos de crecimiento de mayor valor. España se posiciona como uno de los países más atractivos a nivel mundial para invertir en energía verde, destacando su estabilidad, madurez en el sector renovable y abundancia de recursos.
Ignacio Hornedo, socio de corporate y M&A de Allen & Overy, coincide en el atractivo del sector energético español, señalando que el país ha logrado consolidarse como un hub europeo en el ámbito de las renovables. A pesar de los retos pendientes, se sigue generando interés entre inversores internacionales, especialmente en proyectos fotovoltaicos y tecnologías novedosas como el hidrógeno verde, biofueles y e-charging.
Corral también destaca la previsión de una mayor inversión en redes eléctricas, con la mira puesta en exportar energía a Europa. Proyectos relacionados con gases renovables, como biometano e hidrógeno verde, también ganarán relevancia en el futuro. Además, se espera un crecimiento en la inversión en tecnologías de baterías, siempre y cuando exista una regulación clara que favorezca esta área. Grandes grupos inversores, como Iberdrola y Norges, muestran un interés continuo en ampliar alianzas, como lo evidencia su reciente acuerdo con una coinversión de más de 2.000 millones en España y Portugal en los próximos tres años.
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