La calma retorna tras el fin de semana sin eventos entre Israel e Irán, permitiendo a las bolsas repuntar aproximadamente un 1%. Paralelamente, el precio del petróleo cae alrededor del 1%, indicando una posible estabilización en Oriente Medio.
La tensión entre Israel e Irán, que había alcanzado un punto álgido la semana anterior con ataques por parte de ambos países, parece comenzar a ceder. Este fin de semana transcurrió sin incidentes relevantes, lo que ha permitido un respiro tanto en los mercados bursátiles como en el precio del petróleo.
En cuanto a las bolsas, se registra un repunte cercano al 1%, reflejando la confianza de los inversores ante la disminución de la incertidumbre geopolítica. Por otro lado, el precio del petróleo experimenta una caída del 1%, situándose en torno a los 86 dólares por barril, después de haber superado la barrera psicológica de los 90 dólares días atrás.
Norbert Rücker, experto en economía de Julius Baer, señala diversas razones detrás de esta posible reversión de tendencia en el mercado petrolero. Entre ellas, destaca la ralentización de la demanda, una posible disminución en los recortes de producción por parte de Arabia Saudí, o simplemente un ajuste en el optimismo excesivo del mercado hacia niveles más realistas.
Los analistas de Link Securities también observan este descenso en el precio del crudo como un indicador de la aparente estabilización en Oriente Medio, lo que podría brindar un impulso a la renta variable. Coincidiendo con esta visión, los expertos de Banca March destacan que las tensiones entre Israel e Irán parecen estar disminuyendo, lo que se traduce en un inicio de semana con el petróleo a la baja.
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