El petróleo se mantiene en una cuerda floja: ¿Cómo podría el conflicto en Oriente Medio influir en los precios del crudo y en la economía global?
El petróleo, después de haber experimentado un aumento en su precio debido al ataque de Hamás en la frontera de Israel, se ha estabilizado en torno a los 86,9 dólares por barril. A pesar de esta aparente calma, los expertos del Banco Mundial advierten que la amenaza en Oriente Medio aún persiste y podría provocar un aumento histórico en los precios del petróleo, alcanzando los 150 dólares por barril.
El Banco Mundial ha presentado tres posibles escenarios ante una escalada en el conflicto en la región, cada uno con consecuencias significativas en los precios del petróleo. El primero es una «pequeña perturbación» que podría resultar en una reducción de la producción de petróleo de entre 500,000 y dos millones de barriles por día, lo que llevaría el precio del crudo a un rango de 93 a 102 dólares por barril. El segundo escenario implica un programa de recortes de producción mucho más grande, de hasta cinco millones de barriles diarios, lo que podría elevar el precio a un rango de 109 a 121 dólares por barril.
Sin embargo, el escenario más alarmante es la «gran perturbación», que se asemeja a la crisis del embargo petrolero de 1973. En este caso, el precio del petróleo podría dispararse hasta un 75% en comparación con los precios actuales, alcanzando hasta 157 dólares por barril.
El economista jefe y vicepresidente senior de Economía del Desarrollo del Banco Mundial, Indermit Gill, destaca que este conflicto en Oriente Medio ocurre después del impactante conflicto entre Rusia y Ucrania, que ya había perturbado significativamente los mercados de productos básicos. Advierte que, en caso de una escalada, la economía global podría enfrentar un doble shock energético, lo que sería inusual en décadas, debido a los conflictos en Ucrania y Oriente Medio.
A pesar de estas advertencias, algunos analistas sugieren que es poco probable que se produzca una escalada significativa en el corto plazo. Argumentan que la probabilidad de una escalada lo suficientemente grave como para desestabilizar los mercados financieros globales y elevar el precio del petróleo por encima de los 100 dólares por barril sigue siendo baja.
En resumen, aunque el precio del petróleo se ha estabilizado tras el reciente aumento debido al conflicto en Oriente Medio, persisten preocupaciones sobre posibles escenarios de escalada que podrían afectar drásticamente los precios del petróleo y tener un impacto en la economía global. Las incertidumbres geopolíticas siguen siendo una fuente de volatilidad en los mercados energéticos.
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